Traducido Por: Diana Gordon

El 21 de agosto, el Campus de Hickory de App State abrió sus puertas a los estudiantes. Esto es un sueño hecho realidad para muchos estudiantes que desean asistir al campus principal de App State, pero no pueden pagar la vivienda o no quieren ir a una universidad grande. Sin embargo, para los estudiantes del campus principal de App State, el campus de Hickory se ha convertido en una pesadilla.

Puede ser fácil ver todas las ventajas de tener un campus satélite. La escuela recibe más dinero, más estudiantes pueden asistir, las clases son más fáciles de conseguir y las becas son más fáciles de obtener. Los campus satélites deberían ser algo bueno y deberían ser reconocidos como tal por el cuerpo estudiantil del campus principal. Sin embargo, hay mucha resistencia por parte de los estudiantes del campus principal sobre el Campus de Hickory que uno comienza a preguntarse por qué.

El edificio del Campus de Hickory fue comprado el 19 de noviembre del 2021. La universidad lo promociona como un lugar increíble para estar, al centro de todo, incluso estando cerca del centro de Hickory.

En App State, el campus principal está lejos de ser manejado correctamente y necesita el dinero que se está invirtiendo en el Campus de Hickory. Los estudiantes están molestos, porque parece que la Canciller Sheri Everts está tratando de crear un lugar nuevo para vivir, uno donde el cuerpo estudiantil no se oponga constantemente.

El campus principal de App State está en apuros y es conocido entre los estudiantes de App State. Miren todos los problemas: vivienda, clases, edificios académicos y más. El enfoque no debería estar en otros campus hasta que se arregle el campus principal. El Campus de Hickory no ayuda al cuerpo estudiantil, sino que se está convirtiendo en una máquina de hacer dinero para Everts.

App State necesita que el financiamiento vuelva al campus principal, donde la mayoría de los estudiantes viven y confían para obtener una educación. El dinero también debe destinarse a cosas importantes, a diferencia de los túneles que actualmente están siendo remodelados o de los quioscos del campus que solo están estorbando. Lamentablemente, Everts no lo ve de esta manera.

¿Alguna vez has escuchado la expresión “abandonar el barco”? ¿Cuando las cosas se ponen mal, así que corres hacia otra cosa para escapar? ¿Qué tal los multimillonarios que intentan dejar la Tierra y vivir en otro planeta porque la Tierra se está convirtiendo en un páramo tóxico? ¿Ya ves las conexiones? Everts está abandonando el barco, huyendo de los problemas que causó en App State.

Continúa ignorando las quejas y resistencias de los estudiantes, causando caos en el campus principal, mientras pinta todo como algo bueno. Luego, continúa invirtiendo dinero en el Campus de Hickory, promocionándolo como si fuera tan bueno como App State, con la esperanza de obtener más dinero y más estudiantes, porque el campus principal de App State no puede albergar a más estudiantes.

Los estudiantes deberían tener la opción de ir al Campus de Hickory si no pueden pagar la vivienda de App State. Los campus satélites son una excelente manera de tener una experiencia universitaria sin tener que pagar el precio completo por ella. Todos deberían tener la oportunidad de obtener educación superior y la idea de que haya una opción más económica es genial, especialmente cuando no hay otras oportunidades en la zona.

Sin embargo, el campus principal debería ser un enfoque principal antes de invertir dinero en otro lugar. Esto no es para desalentar a los estudiantes de ir al Campus de Hickory, sino para crear conciencia sobre cuánto se está dejando de lado el campus principal para dar paso al gran escape de Everts.